El Camino del Tao

El “Tao Te Ching” es un tesoro eterno de conocimientos, creado por Lao Tzu, que muestra la forma de llevar una vida completa y en equilibrio. Este texto fundamental del taoísmo nos anima a conectar con el “Tao” - el Camino - y a vivir de una manera genuina y sin esfuerzo.

Con 81 versos, el Tao Te Ching se ve como una orientación para vivir en sintonía con el universo, es decir, el Tao. Su idea principal es que, al entender y vivir de acuerdo con los principios del Tao, es posible superar las creencias limitantes y lograr un estado de equilibrio y sabiduría. El Tao Te Ching se traduce aproximadamente como "el camino de la integridad". En sus 81 versos, ofrece una reflexión sobre cómo ser en el mundo con bondad y ética: una enseñanza valiosa en un entorno donde muchos piensan que eso no puede ser posible.

Si todo te frustra, te hace daño o te da ansiedad, tienes que conocer a Lao Tsé y su Tao Te Ching, un libro que es corto pero impactante. Verás las cosas con una tranquilidad que te hubiera parecido inalcanzable varios años atrás.

1. El Tao (El Camino): Sigue la esencia del universo y vive en sintonía con el flujo natural de la vida.

2. Wu Wei (No-acción): Actúa sin esfuerzo, permitiendo que las cosas ocurran de forma natural y espontánea.
Lao Tsé no se enfoca en el futuro., ni en el éxito. Se refiere a estar presente. Aquí. Ahora. Sin necesitar nada más. “Cuando dejo de ser yo, me convierto en todo. ” Mi identidad era mi prisión. El Tao fue la clave.
“El Tao no se esfuerza. Y aun así, lo consigue todo.”

3. Simplicidad: Acepta la sencillez en tus pensamientos y acciones para hallar la paz interna.

4. Humildad: La verdadera sabiduría y la fortaleza provienen de la humildad y el desapego.
El Tao no requiere aprobación. No se impone. No contiende. Simplemente fluye. Y en ese murmullo, se vuelve inquebrantable. No se trata de un misticismo superficial. Es una psicología antigua genuina. Cuando dejas de intentar controlar, algo dentro se organiza por sí mismo.

5. Quietud: Fomenta la calma interna para acceder a una profundización de la sabiduría.

6. Flexibilidad: Adáptate como el agua para sortear los retos con gracia.
 
El Tao es el Camino natural. No el que te impone un coach. No el que requiere el sistema. Es el que fluye dentro de ti, si dejas de resistir.

7. Desapego: Libérate de lo material y emocional para llevar una vida más enriquecedora.

8. Compasión: Practica la bondad y el amor hacia todos los seres.

9. Aceptación: Abraza el presente y fluye con las circunstancias para vivir en armonía.
El “Tao Te Ching” nos enseña que la verdadera paz y equilibrio se encuentran al seguir el flujo natural del universo, sin forzar ni resistir, y al vivir con sencillez, humildad y compasión.
“Quien sabe no necesita hablar. Quien habla, no sabe.” Si te sientes agotado es porque nunca callas.

Lao Tsé nunca intentó persuadir a nadie. Solo dejó un escrito. Luego, se desvaneció. Un sabio no obliga. Un sabio ofrece sugerencias.

Cuando comprendes el Tao, dejas de pelear. Tampoco te rindes. Solo bailas con la vida. Y permites que ella marque el compás. El Tao no consiste en hacer. Es en deshacer. No se trata de añadir. Es de soltar. Y al final. . . quedarte solo con lo fundamental.

No necesitas cambiar tu ser. Debes recordar quién eres. El Tao ya reside en tu interior. Solo está esperando que apagues el ruido.

Cada vez que tengas dudas... cierra los ojos... y deja que la vida se exprese primero.

Eso es Tao. Eso es tranquilidad.