Todo en la naturaleza, desde la casa de un caracol hasta el movimiento de los planetas responden a un patrón geométrico, del cual se han logrado reconocer diferentes arquetipos geométricos.
Este patrón multidimensional representa la conexión de la vida y el espíritu dentro de los Universos, nos revela como todo lo que existe proviene de la misma Fuente y está íntima y permanentemente entretejido. Como sabemos toda vida-materia tiene un campo energético que muchas veces está en desequilibrio por diferentes motivos, este patrón geométrico ajustable a cualquier campo electromagnético devuelve el equilibrio y la armonía. Al meditar-visualizar en la Flor de la Vida nuestros lóbulos cerebrales son captados por su magnetismo poniéndolos en equilibrio y perfecta resonancia, también estimula al parpadeo de nuestra glándula pineal. Esto es fundamental para que empecemos a conectar con la integridad no solo de uno con la fuente sino también colectiva.
La flor de la vida tiene 19 círculos del mismo tamaño de donde nacen 36 arcos que conforman un hexágono dentro de un círculo mayor. La flor de la vida contiene otros dos símbolos sagrados como la semilla de la vida y el huevo de la vida, mientras que al mismo tiempo de ella se derivan otras dos formas como el fruto de la vida y el cubo de metatrón.
Según un gran experto en geometría sagrada llamado Drúnvalo Melchizedek, la flor de la vida existe en el fondo de nuestra conciencia, y así lo demuestran vestigios mesoamericanos, pues en cualquier lugar donde hubo indicios de conciencia miles de años atrás, se pueden encontrar representaciones de la flor de la vida. Su nombre nace de su parecido con una flor, y porque precisamente representa el ciclo de un árbol frutal y su metamorfosis, que se da en cinco pasos: del árbol a la flor, de la flor a la fruta, de la fruta a la semilla y de la semilla vuelve de nuevo al árbol. La naturaleza siempre está en este constante ciclo circular. En este sentido, la flor de la vida representa el origen de las cosas y al mismo tiempo la indisoluble conexión entre todas las cosas.
Su patrón es una red que interconecta todos los niveles del universo y representa la unidad con el todo, idea planteada en muchas corrientes filosóficas de todo el mundo ya desde la antigüedad. La flor de la vida es la imagen sagrada de la unidad del cosmos, es la matriz de donde nace todo y a donde vuelve todo. Según Melchizedek, este símbolo sagrado contiene dentro de sus proporciones cada fórmula matemática, cada ley de la física, cada armonía de la música, toda forma de vida biológica incluyendo tu cuerpo específico. Contiene cada átomo, cada nivel dimensional, absolutamente todo lo contenido en universos de forma de onda.
Por ser considerada la matriz de la creación es una forma divina y muy poderosa para armonización de espacios con Geometría Sagrada y para sanación en personas y animales.
Una de las maneras de armonizar un espacio con Geometría sagrada es colocar un armonizador de geometría sagrada en la habitación, sala de terapias, oficina o comercio que se quiere armonizar.
Es importante que el armonizador reciba y deje pasar la luz natural.
Es conveniente colocarlo cerca de una ventana para que el armonizador potencie y amplifique la energía lumínica. Se deberá tener en cuenta el color, dependiendo de qué aspecto de tu vida quiere trabajar o potenciar.
Otro manera de utilizar el poder de este mandala es combinándolo con cristales, creando lo que se conoce como Rejillas de cristal. En este caso la flor de la Vida potencia los efectos de los cristales, siendo utilizada en rituales de abundancia, prosperidad, amor, etc.
También forma parte de la Rejilla Cristalina de la Tierra...
La manera mas potente de utilizar el poder de la Geometría Sagrada y especialmente el de la Flor de la Vida es realizando meditaciones visualizando la forma. Consta de centrar tu mirada en una imagen de este código sagrado mientras escuchas una música relajante y armoniosa muy suave.
Cuando se hace una meditación observando la flor de la vida lo que se está haciendo es dedicar la atención a la unidad del cosmos, a la conexión entre todos los seres, a la comprensión de que todos somos uno.
En realidad, con solo mirar este símbolo sería suficiente. Solo explora la forma de usar el arte para ayudarte a recibir los beneficios de la información que esta geometría contiene. La idea es usar el arte consciente para que tu mente inconsciente reciba y acepte los patrones originales de perfección que te lleven a sentirte mejor, más en ti, más poderoso o poderosa. Es un juego, es creación, es arte aplicado a la estimulación cognitiva, es simplemente usar la imagen, la voz, la música…
Los mandalas son representaciones, para así decirlo, simplificadas y decoradas de la flor de la vida. Observar, dibujar y/o pintar mandalas es un hermoso viaje de meditación en el que uno puede abrir y expandir su conciencia a esta gran idea universal que representa la flor de la vida. La geometría sagrada comprende diversas “representaciones simbólicas de las fuerzas de la creación del universo”.